Las recientes amenazas biológicas provenientes de la naturaleza han puesto en riesgo la salud humana y animal y, de esta manera, han dejado en evidencia que la sociedad no está preparada para responder eficientemente a su prevención y control. Se tardó más de una década descubrir un nuevo antimicrobiano de amplio espectro —la halicina— que ejerciera una efectiva acción antibiótica contra Clostridium difficile, Acinetobacter baumannii y otros enteropatógenos resistentes a carbapenos. Para el diseño de la halicina, se combinaron las tecnologías de frontera machine learning y neural biology, con las cuales se alimentaron algoritmos con miles de estructuras de moléculas con reconocida actividad antimicrobiana. Estos algoritmos filtraron y seleccionaron nuevas candidatas según su estructura y orden atómico, para generar nuevas estructuras que fueron tomadas y probadas, en ensayos in vitro e in vivo, contra patógenos de importancia vegetal, animal y humana.
Lo anterior es solo un ejemplo de